Por Andrés García
En el marco del Plan Nacional de Música para la Convivencia, que abandera en el territorio nacional el Ministerio de las Culturas, las Artes y los Saberes – el cual busca fortalecer la democracia y la cohesión social a través de la música – en articulación con la Politica Pública de Cultura (ordenanza 015 del 30 de mayo de 2023) y el Plan Departamental de Música 2022 – 2032, la Gobernacion de Risaralda, a través de la Dirección de Cultura y Artes, realizó el pasado domingo la obertura oficial de la Banda Sinfónica Departamental, en el municipio de Pueblo Rico.
En compañía del Alcalde Martin Siagama, un nutrido público de amantes de la música y visitantes, atraídos por el espectáculo artístico, se acercaron al ingreso de la Parroquia Corazón de María, ubicada en la plaza principal del municipio más alto del departamento, para escuchar a los 60 jóvenes – entre los 12 y 24 años en promedio, provenientes de los 14 municipios de Risaralda – quienes realizaron su primera presentación, gracias al campamento ensamble que desde el viernes 22 de noviembre realizaron en la localidad, bajo el direccionamiento del Maestro Hernán Echeverri y la coordinación de la Dirección Departamental de Cultura.
Pueblo Rico no es solo el municipio triétnico de Risaralda, por excelencia. Además de su riqueza de flora y fauna, quedó demostrada su pasión por la música. A la bella sala de Teatro que posee, con todas las condiciones de infraestructura y operativas para la realización de eventos artísticos de gran calado, se le aúna esa sensibilidad especial que el pueblo manifiesta para con expresiones sublimes como la música. La música no solo enaltece el espíritu humano. Lo vuelca hacia su entorno más inmediato, generando la dignificación del proyecto humano, cohesionándolo con el de sus semejantes.
La consentida del Tatamá, no solo vivió un fin de semana de música. Fue el epicentro de 60 jóvenes y sus familias que han encontrado en el arte la manera de encauzar sus vidas, avanzando hacia senderos de paz, convivencia, reconciliación, perdón, apoyo, fraternidad, trabajo en equipo, reconocimiento de la otredad, respeto por la diferencia, tolerancia, amistad, compasión, integración, calidad de vida, autoestima, identidad, armonía, unión. ¡Esta es la gente que necesita Colombia!
Cuando la Banda Sinfonica Departamental toca, es Risaralda entera la que se pronuncia. Es la voz de un pueblo que encuentra en el arte la forma más bella de avanzar por la vida, de identificar puntos de encuentro en medio de la diferencia. Por eso insisto que el arte, además de ser el camino más expedito hacia la reconciliación del ser humano consigo mismo, es una Política Pública de Salud Física y Mental, ya que conduce al hombre al encuentro con su esencia, ayudándole a identificar y reconciliar con su grandeza y ver grandeza en el otro. Una persona que vibra a ese nivel difícilmente hará algo en contra de sí misma ni de quienes o de aquello que le rodea. Por el contrario, por lo general, aporta elementos de convivencia, construye proyecto de vida y hace de cada nota musical un acto de paz, en la sinfonía de la vida.
¡Risaralda ya cuenta con Banda Sinfónica! Nos corresponde ahora acompáñala, sentirla, escucharla, vivirla y estar muy orgullosos de constatar cómo el departamento avanza hacia terrenos de equidad e inclusión social, desde el arte. *Director de Cultura y Artes de Risaralda.